Qué es el Keyword Research o Búsqueda de Palabras clave
Que es el Keyword Research cuando hablamos de Seo
Para empezar, la traducción al español del Keyword Research, sería “búsqueda de palabras clave”.
Pero ¿qué son las palabras clave y por qué hay que buscarlas?
Vamos por partes.
Qué son las palabras clave.
Una de las cosas que debemos tener en cuenta cuando hacemos un sitio web es que lo que deseamos es ofrecer algo a alguien.
Puede ser tan solo información sobre una temática que dominas. Ya sea por placer porque es tu hobby o porque estás haciendo un nicho para monetizar.
Puede ser porque vendes algo. Ya sean servicios o Productos.
Tanto lo uno como lo otro es un negocio digital. Para que tu negocio funcione necesitas Marketing.
Marketing es un anglicismo que utilizamos para definir las técnicas de venta y publicidad de toda la vida.
Antiguamente solía decirse que “el buen paño en el arca se vende”. Eso quería decir, básicamente, que, si el producto era bueno, ni siquiera necesitabas exponerlo porque la gente ya te lo pedía.
En la actualidad, eso no sirve. En el arca no se vende ni el bueno ni el malo.
Sino lo muestras al público y no utilizas estrategias de Marketing, tu producto, aunque sea el mejor del planeta, nadie te lo va a comprar.
Estamos saturados de información. Incluso, muchas más veces de lo que sería razonable, de información engañosa que utiliza recursos psicológicos que incitan a la gente a comprar.
Esas técnicas de Marketing para dar a conocer tu producto (cuidado no te digo que engañes ni manipules a nadie, solo que aproveches lo que te aportan) son las que harán que lo que tu ofreces sobresalga por encima de tu competencia. Y, competencia, como bien sabes hay mucha.
Para ganar, tienes que sobresalir por encima de tus competidores o, como mínimo, alinearte con ellos en las búsquedas en Google.
Keyword Research es, como te decía, la búsqueda de esas palabras clave que van a apoyar tu estrategia de Marketing para distinguirte de tus competidores.
Aquí la palabra clave, se utiliza en doble sentido:
- Como la clave del misterio a resolver. Si tuviéramos un mapa del tesoro y un texto con pistas cifrado en código, sería esa palabra o palabras que nos permiten hallarle el sentido a todo el texto y poder descifrar el mapa. Tal cual. Al más puro estilo del Código Da Vinci.
- También en el sentido de llave. Es la llave que nos va permitir abrir la puerta de nuestra web para dejar entrar a las personas y que la vean por dentro, que, al fin y al cabo, es lo que pretendemos. Nuestra web es el escaparate donde ofrecemos nuestros productos o servicios. Si la puerta está cerrada y la persiana bajada, nadie va a poder ver lo maravilloso que es lo que ofrecemos.
En ambos casos, esa clave, no la tenemos nosotros, la tiene el buscador. En un alto porcentaje, Google. No es el único buscador, pero es el gigante de los buscadores. Como te decía al inicio, es el Gran Buceador con ojos por todo el océano de Internet y quien decide qué mostrar a los demás buceadores.
Y ¿Por qué la clave la tiene Google?
Porque es su casa. Y, de la misma manera que tu dejas entrar en tu casa a ciertas personas y a otras no. Google hace lo mismo.
A esa entrada en casa de Google se le llama “indexación”. Cuando escuches que hay que indexar un sitio web, o que lo ha indexado o que no lo ha indexado, estamos diciendo, en realidad, que hemos llamado a la puerta de su casa, le hemos dicho nuestro nombre y Google ha decidido o no, dejarnos entrar en su casa.
En la mayor parte de los casos, deja entrar a todo el mundo. Pero, también hay casos en los que rechaza a alguien.
Eso mismo se aplica a cualquier buscador.
La Indexación en buscadores, solo quiere decir que estás dentro de su casa o, para seguir con el símil marinero, estás dentro de su océano.
Pero, no te creas que es tan fácil. Google, ni ningún otro buscador, te recibe con los brazos abiertos y te sube al pódium para presentarte a los demás, que todo el mundo te conozca y te dé la bienvenida.
No, que bah.
Te deja en el quicio de la puerta, justo en la orilla, frente a una barrera de oleaje que tendrás que cruzar nadando a brazo partido para adentrarte en el océano. Luego tendrás que sortear, las barreras de coral, evitar que se te coman los peces más grandes que tú y, en definitiva, transformarte en ese pececito de colores en el que Google se fije.
Las palabras clave son, precisamente, la comida que te hará convertirte en el pez de colores.
Una vez que Google te haya permitido meterte en la orilla, deberás alimentarte de palabras clave, como si de maná divino se tratara, para crecer, engordar y distinguirte de tus compañeros.
Las palabras clave deben ser tu alimento, o, mejor dicho, claro está, el alimento de tu web.
Pero ¿por qué son tan imprescindibles las palabras clave?
Porque, no es que los buscadores, sean así de caprichosos, sino que tienen un doble motivo para dejar entrar a la gente en su casa. Y no es precisamente para hacerles un favor.
El Gran buceador Google, así como todos los demás, abre su océano a dos tipos de personas:
- 1. Las que tienen algo que ofrecer
- 2. Las personas que buscan algo de lo que los anteriores ofrecen.
Y ¿qué gana Google?
Por supuesto, dinero. Mucho, muchísimo dinero. De diferentes formas y por muchos medios. De ti, de mí, de todo el mundo. Google es un negocio muy rentable. Quizás el más rentable del planeta. En un enorme Cachalote, con millones de ojos que domina todos los océanos del mundo.
Lo que no es, es altruista. No da nada a cambio de nada. Si él gana, tú ganas, sino le sirves para ganar, olvídate, es así de crudo.
Mira el océano. Es maravilloso. Con esos tonos azules de mil tonalidades. A veces embravecido, otras en calma, pero siempre fascinante. Pero, lo que nunca te imaginas es, que, aun cuando está en calma, en su interior se libran miles de batallas por la supervivencia entre las especies y dentro de las propias especies.
Ahí es donde te estás metiendo o donde te has metido ya.
Tu alimento para sobrevivir es: las palabras clave.
Las palabras clave son las palabras que, los habitantes de ese océano, están empleando para buscar aquello que necesitan.
Ni más ni menos.
Pongamos que vendes ropa, por poner un ejemplo facilito.
Pero, tú no vendes una ropa cualquiera, vendes ropa personalizada o con un diseño propio diferente de todos los demás.
Si en tu web pone solo “vendo ropa”. Serás un vendedor más de ropa entre todos los que venden ropa.
Si alguien pone la palabra ropa en el buscador va a encontrar cientos de miles de sitios donde venden ropa. ¿le sirve para algo?
Pues, probablemente no… o sí….
Hummm ¿en qué quedamos en que si o en que no?
Pues, lo mismo sí, porque Google en su gran sabiduría en el negocio, le va a ofrecer como resultados en primer lugar aquellos que han pagado por poner un anuncio (a poner anuncios les llamamos SEM, que, a diferencia del SEO que es atraer tráfico orgánico, o lo que es lo mismo sin invertir un duro, el SEM es atraer tráfico pagando) en la primera posición.
Y, quizás, a esa persona que no buscaba una ropa en particular, le venga bien.
Por cierto, cuando te hablo de Tráfico no es que te vas a encontrar en la autopista o en la calle Mayor de tu pueblo, es casi lo mismo, pero no. Es el tráfico que vas a tener en la autopista de la información que es Internet y en la cual vas a crear una salida que dirija a la gente directamente a tu casa.
¿Te imaginas poder poner una salida en una autopista que condujera únicamente a tu negocio?
Sería maravilloso ¿verdad?
Pues tanto el SEM como el SEO hacen eso, una vía directa para que visiten tu sitio.
El primero es más rápido, pero también más caro.
El segundo, el SEO, que es de lo que hablamos, es un poco más lento, no demasiado si lo haces bien, pero mucho más barato.
Tampoco creas que el hecho de pagar un anuncio (SEM) va a hacer que Google te coloque en cabeza, ayuda, pero no es sinónimo.
Lo que está claro es que tú, con tu estupenda ropa de diseño propio no vas a aparecer (a menos que hayas pagado una fortuna en anuncios, y aun así…
Generalmente, los que buscan algo, no ponen simplemente “ropa” en el buscador, porque ya saben que de esa forma no van a tener buenos resultados. Sino que pone palabras más específicas. Es decir, frases que se ajusten más a lo que están buscando.
Por ejemplo, lo más sencillo: ropa de mujer, ropa de hombre, ropa de niño.
Con esto, las posibilidades de encontrar lo que buscan se han reducido ya considerablemente en cuanto a las respuestas que van a obtener.
Aun así, los resultados van a ser enormes y, una vez más, en las primeras posiciones siempre estarán los anuncios.
Ahora, vamos a aumentar la frase y poner que busquen algo así como “ropa de mujer de diseño”.
Hummm, ahí estarás cada vez más cerca de que te encuentren.
Vamos ahora a imaginar que el diseño de tu ropa sea, por ejemplo, vintage. Si la persona, busca “ropa de mujer de diseño vintage”, tienes muchas más probabilidades de que salgas en los resultados porque ya están buscando lo que se acerca a lo que tu ofreces.
¿Ves la diferencia?
Hemos comenzado con una palabra (short tail) y hemos conseguido cientos de miles de resultados que no correspondían a la intención de búsqueda de las personas.
Luego hemos aumentado a dos palabras y hemos podido acotar más los resultados. Pero, aun así, seguía habiendo demasiados como para sobresalir entre tu competencia.
Finalmente, hemos puesto una frase (long tail) y casi, casi hemos dado en el clavo. Aunque todavía hubiera más por hacer. Necesitamos más palabras y más frases para ganar a tus competidores.
Bueno, parece fácil ¿verdad?
Pues no lo es. Porque para que tu sitio web aparezca en Google cuando quien busca ponga eso, esas palabras tienen que estar estratégicamente colocadas en los textos de tu sitio web. De forma que el gran buceador, las encuentra, las vea, le gusten y las ofrezca a quien las busca.
Por eso, lo principal y más importante que tienes que hacer para que tu sitio web se vea es averiguar cómo buscan las personas tu producto. A eso le llamamos Keyword Research, que no es otra cosa que averiguar, por un lado, lo que llamamos “intención de búsqueda”.
Es decir, la intención que tiene el usuario, es decir, tu potencial cliente cuando pone las palabras mágicas en el buscador. Suponemos que no pondrá zapatos si busca ropa. Pero, a veces hay casos rarísimos.
Por otro lado, cómo refleja esa intención de búsqueda en lo que quiere buscar, es decir, qué palabras escribe en la ventanita del buscador.
En otras palabras, como se les ocurre a los potenciales clientes, escribir las pistas que les conducirán al mapa del tesoro.
Ahí es donde entramos nosotros, los profesionales del SEO. Los que llevamos tiempo buceando por el océano de Google, nos hemos especializado en comprender al Gran buceador (tarea nada fácil) y tenemos las herramientas necesarias para poder descifrar el código secreto que emplea para poner tu web en una posición u otra.
Nos basamos en términos tales como: palabras clave de cola corta, palabras claves de cola larga, volumen de búsquedas para una o unas palabras clave o Keywords determinadas, tráfico web, posicionamiento web, etc. Que puedes ir viendo en otros post.
Nuestro trabajo, el mío en este caso, consiste en examinar lo que ofreces en profundidad. Comprenderlo poniéndome en el lugar de Google, poniéndome en el lugar del potencial cliente que lo busca y averiguar cuáles son esas palabras clave que son imprescindibles para que te encuentre, las que son menos imprescindibles, pero ayudan a hacerlas más relevantes.
Por poner un ejemplo culinario. Si vamos a hacer un plato, el que sea, necesitamos un o unos ingredientes básicos, luego los ingredientes de la salsa, las especies y condimentos, cocinarlos de manera que salga el plato deseado y, antes de llevarlo a la mesa, añadirle la guarnición, los toques decorativos, la vajilla adecuada.
En fin, todo aquello que sirva para que, cuando quien se lo va a comer, alucine desde el primer momento en que lo ve, hasta cuando se lleva el primer trocito a la boca.
El plato, debe entrar por todos los sentidos, no solo el gusto, sino la vista y el olfato.
Eso distingue a un Chef de un bareto de carretera. Estará igual de sabroso, pero la imagen no es la misma.
Tú, con tu Keyword Research, es decir, con las palabras clave, tienes todos los ingredientes que necesitarás para poder hacer de tu web un plato exquisito para todos los sentidos. En serio, hay sitios web tan bien hechos que hasta parece que tienen aroma.
Luego necesitarás aplicar esos ingredientes de la manera adecuada. Pero, ese es otro paso.
Como se suele decir, no se puede hacer tortilla sin romper los huevos. Cierto. Pero es aún más cierto que no puedes hacer una tortilla si ni siquiera tienes huevos.
Para convertirte en un pez de colores en el océano de Google necesitas el alimento principal: las palabras clave.
Déjame que te las encuentre.